Cómo narrar una historia en sus presentaciones profesionales.
Narrar historias es una forma divertida de humanizar su tema. Una historia proporciona un elemento de la “vida real” en su tema haciéndolo más asimilable para el público. Narrar historias también es una gran manera de cambiar el ritmo de su presentación. Aquí hay algunos consejos para ayudarle a incorporar la narración de historias en sus presentaciones.
- Las historias cumplen varios propósitos en su presentación. Pueden usarse para resaltar y aclarar un punto específico al que quiera llegar con su discurso. Las historias también pueden recalcar aquellos puntos de su mensaje a los que quiera dar énfasis a su importancia.
- Las historias deben ser acordes al tema. Las historias deben también coincidir con las necesidades y deseos de la audiencia en términos de su nivel de inteligencia, experiencia y otros datos demográficos tales como la edad y ocupación. Las historias deben ser narrables al público y fáciles de entender.
- Narrar una historia puede cambiar el ritmo de su mensaje. Las historias pueden servir como un descanso mental para su audiencia para que puedan procesar la información que han obtenido.
- Las historias humorísticas son magníficas para abrir la presentación y pueden fijar el tono de su mensaje. Hable acerca de los problemas y errores que ha cometido. El público gusta del humor autocrítico porque pueden verse reflejados cometiendo los mismos errores o teniendo las mismas consecuencias.
- Evite los detalles innecesarios de la historia en su discurso. Potencialmente puede perder a su público con todos esos detalles que no sirven al propósito fijado, así que evítelos.
- Use historias humorísticas breves en su discurso. Si su historia es muy larga o tarda mucho en llegar al chiste, su audiencia podría ignorarlo.
- Diga dónde ocurre su historia. De a su público información concreta para pensar y que puedan crear sus propias imágenes mentales.
- Use cosas que su audiencia pueda asociar fácilmente con su historia. Su audiencia debe familiarizarse con los detalles de su historia para que puedan permanecer enganchados en ella, sin embargo, sólo sea detallado en conocimientos comunes. Los conocimientos especializados o “información privilegiada” no son narrables a la mayoría de la gente porque pocos saben acerca de ella.
- Deje que sus palabras trabajen para usted. Enfatice los adjetivos y los verbos que sean de más interés para su audiencia.
- Ensaye la narración de su historia. Cada palabra cuenta y omitir detalles puede influir en que su público relacione su historia con ellos mismos o no.
- Permita que las emociones envuelvan su narración. Seduzca al público con su narración expresando sus emociones. La narración no es un elemento difícil de agregar a sus discursos profesionales. Practicando, tendrá la posibilidad de agregar más historias a sus presentaciones para darles vida y cambiar el ritmo. Encontrará que su público se mostrará más comprometido con lo que está diciendo porque mentalmente pueden asimilar mejor la información. Si les cuenta historias, tendrán imágenes mentales rondando en su mente. Se verán a sí mismos en las historias y las relacionarán mejor consigo mismos. Comience agregando una historia breve y acreciente sus habilidades narrativas desde ahí.